Recientemente hemos hecho difusión de la participación de nuestra sociedad en la recién creada Red Española de Investigación en COVID Persistente (REiCOP)1. Aunque parezca obvia la motivación por la que nos sumamos a esta iniciativa como sociedad científica, no es banal pararse un instante, reflexionar y repasar los elementos esenciales y más relevantes en relación a ella.
Una sociedad científica se siente atraída, si no obligada, a plantearse si participar o no en una red de investigación. Por lo que, si el tema que motiva esa creación se alinea con nuestros intereses, que en nuestro caso es aglutinar a profesionales y sus preocupaciones por las personas mayores, la respuesta inicial es sí. Un sí condicionado a aspectos de calidad de los componentes, de las aspiraciones claras, de compromiso y de la oportunidad. En estos últimos aspectos, yo como representante en esa red de la SEGG y sus miembros, os puedo transmitir que se cumplen, añadiendo un aspecto intangible, que no sabría cómo expresar y que todavía incrementa esta garantía de compromiso.
Volviendo al punto de la alineación a nuestros intereses, huelga decir la importancia de la presencia de síntomas persistentes en la población anciana.
Las personas mayores que han sobrevivido a la COVID parecen ser más propensas, que los pacientes más jóvenes, a tener síntomas persistentes como fatiga, falta de aire, dolores musculares, palpitaciones, dolores de cabeza, dolor en las articulaciones y dificultad con la memoria y la concentración. O sea, problemas relacionados con la COVID prolongada o persistente.
A todo esto, hay que añadir que muchos de estos síntomas se pueden confundir con otras alteraciones de la salud que los ancianos pueden sufrir, incluso simultáneamente, como por enfermedades osteomusculares, cardíacas, respiratorias o por degeneración neurocognitiva.
Actualmente no existen pruebas de diagnóstico específicas para identificar una situación de COVID persistente, se sabe poco sobre los factores de riesgo para padecerlo, y menos un planteamiento terapéutico más allá del sintomático. Pero si no identificamos la COVID persistente entre los sobrevivientes de COVID de edad avanzada, éstos no podrán recibir la atención adecuada. En definitiva, identificar si un mayor padece COVID persistente se convierte en una tarea complicada y compleja, que todavía se enmaraña más, si, como se sabe, muchos pacientes pueden haber pasado la COVID asintomáticamente, sin ser diagnosticados, y en cambio acabar padeciendo esta forma prolongada de la enfermedad de manera sintomática.
Ya podemos intuir lo que es una práctica habitual en nuestro sector, que las intervenciones deberán ser integrales, “multi” e “inter” disciplinares, donde cada profesional asistencial, o relacionado, aportará sus habilidades y competencias para un resultado más óptimo en todos los ámbitos biopsicosociales de la persona mayor con COVID persistente. Esto implica poner en el centro de estas intervenciones a la persona afectada, con sus opciones de proyecto vital y deseos.
En este sentido, una red que aglutina un número tan importante de sociedades y personas del ámbito profesional asistencial, de las ciencias de base y de disciplinas relacionadas, más que no menos, asociaciones de pacientes afectados de COVID persistente, cumple con esa premisa de cubrir la necesidad de contar con esa orientación multifactorial y poliédrica al problema. Sí, es cierto, ese volumen que tanta fuerza puede hacer, puede convertirse en algo ingobernable, pero a día de hoy, las personas que han estado liderando el proyecto, han hecho gala de compromiso y resolución efectiva. Si se mantiene esa gestión sólida, flexible e ilusionada, esta red puede ser un buen entorno para generar o sumarse a proyectos.
Personalmente aprovecho estos párrafos para recordar los síntomas más prevalentes hallados en las personas con COVID persistente, independiente de la edad:
- Tos y sensación de falta de aire.
- Pérdida del olfato o cambio en el gusto
- Fiebre, dolores musculares o de cabeza.
- Confusión mental, dificultad de concentración o en la memoria.
- Cansancio o cambio del humor.
Y, con mucha probabilidad, si se hallan claros identificadores diagnósticos, muy probablemente el abanico de síntomas se amplíe.
Entonces ¿qué hacer o recomendar? Existe el consenso de aconsejar a la persona que:
- Busque atención médica.
- Busque que la atención sea Integral.
- Recupere la actividad gradualmente.
- Que tenga calma.
- Y que considere la existencia de vulnerabilidades personales para cada uno.
Para dar fin a mis reflexiones, os animo a participar en los diferentes grupos ya creados en REiCOP, o en los futuros; la SEGG y sus instrumentos, será sensible a vuestras aspiraciones y os aconsejará adecuadamente.
Las fuentes que han inspirado estas letras son múltiples, pero considero recomendar unas pocas, por ser un ejemplo de publicación científica o por representar un documento divulgativo de calidad.
- Chicago Tribune en publicación accesible por internet y redactada por Judith Graham, de Kaiser Health News, el 3 de junio de 2022 con el titular ¿Eres mayor y tienes síntomas de covid persistente? Esto es lo que deberías hacer.2
- Estudio RECOVER. Investigando COVID para mejorar la recuperación. El Instituto Nacional de Salud (NIH) ha creado la Iniciativa RECOVER para aprender sobre los efectos a largo plazo de COVID, Considerar las vulnerabilidades personales y los pacientes ancianos no está descartados en su reclutamiento. (web).3,4
- 5 consejos para los mayores de 65 años, divulgación Iberoamericana.5
- Áreas web Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, Sociedad Española de Medicina General y Familia, Sociedad Española de Radiología Médica, Sociedad Española de Medicina y Seguridad en el Trabajo, Sociedad Española de Calidad Asistencial o Sociedad Española de Medicina de Laboratorio, entre muchas otras.1,6–10
- Guía española de COVID persistente.11
- Publicaciones en Geriatría, Atención Primaria y otras áreas.
Antonio Yuste Marco. Especialista en Geriatría. Representante de la SEGG en REiCOP. Jefe de estudios y Responsable de Docencia del Consorci Sanitari de l’Alt Pendès i Garraf (CSAPG) en la provincia de Barcelona, Cataluña.
Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:
https://www.segg.es/actualidad-segg/2022/10/04/reicop-y-segg-los-mayores-y-el-covid-persistente
