El artículo destaca la presentación de la Prof. Gunhild Waldemar en el Congreso EAN 2023 sobre el uso de big data en el cuidado de los trastornos neurodegenerativos. Prof. Waldemar mencionó cómo los grandes volúmenes de datos pueden tener un impacto positivo en el diagnóstico y tratamiento de la demencia.

Se señalaron desafíos importantes y necesidades insatisfechas en los trastornos neurodegenerativos, como la baja tasa de diagnóstico, la progresión lenta, la falta de cura y el aumento esperado en el número de personas con demencia. Los trastornos neurodegenerativos suelen diagnosticarse años después del inicio de los primeros síntomas.

La presentación mencionó el uso de big data en la identificación de factores de riesgo modificables, lo que puede permitir la implementación de medidas de prevención personalizadas. Se mencionaron diversas fuentes de datos, como biomarcadores moleculares e imagenológicos, registros genómicos, datos de investigación de uso secundario, registros electrónicos de salud, datos derivados del autocontrol (como dispositivos portátiles y aplicaciones de teléfonos inteligentes), entre otros.

Se mencionaron ejemplos de programas en curso, como PROMINENT y COGNO-SPEAK, que utilizan plataformas digitales y herramientas de inteligencia artificial para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, así como para evaluar los primeros signos de demencia y enfermedad de Alzheimer.

El enfoque basado en datos podría ayudar a los pacientes en el futuro al proporcionar perfiles de riesgo personalizados, seguimiento de biomarcadores digitales y sistemas de apoyo a la toma de decisiones clínicas. Esto permitiría un diagnóstico temprano y una atención más precisa, lo que podría conducir a mejores resultados de tratamiento.

Sin embargo, se identificaron desafíos relacionados con el uso de datos en el cuidado de los trastornos neurodegenerativos, como el riesgo de sobrediagnóstico o diagnóstico erróneo, la validación de los datos y el acceso desigual a la atención médica digital. Se destacó la importancia de abordar estos desafíos para garantizar el éxito y la equidad en la implementación de la atención basada en datos.

En conclusión, se señaló que el cuidado basado en datos tiene el potencial de contribuir a una atención médica basada en evidencia y rentable, mejorar la precisión en la prevención, diagnóstico y tratamiento en etapas tempranas de los trastornos neurodegenerativos, descubrir nuevos objetivos terapéuticos y transformar la relación médico-paciente y el papel del neurólogo.

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