Resultados entre marcapasos sin cable vs marcapasos transvenoso posterior al reemplazo percutáneo de válvula aórtica

El reemplazo valvular aórtico transcatéter (TAVR) ha demostrado ser efectivo en el tratamiento de la estenosis aórtica severa. Cada año, el volumen de TAVR aumenta, superando al número de reemplazos valvulares aórticos quirúrgicos. No obstante, el riesgo de requerir un marcapasos definitivo sigue siendo una de las complicaciones más significativas asociadas a este procedimiento.

Un marcapasos sin cables es un dispositivo pequeño, con forma de cápsula, que se implanta en el ápex del ventrículo derecho, lo que reduce las complicaciones relacionadas con los cables de estimulación transvenosos. Dado que una gran proporción de los trastornos de conducción se resuelven durante el seguimiento de los pacientes, los marcapasos sin cables se presentan como una alternativa atractiva. Sin embargo, existen pocos datos claros sobre esta estrategia terapéutica tras el TAVI.

El objetivo de este estudio retrospectivo multicéntrico fue examinar la tendencia en el uso de marcapasos sin cables posterior al TAVR y comparar los resultados a corto y mediano plazo entre los marcapasos sin cables y los marcapasos transvenosos tras el procedimiento.

El punto final primario (PFP) incluyó resultados intrahospitalarios y un seguimiento de dos años en cuanto a muerte por todas las causas, hospitalización por insuficiencia cardiaca (IC), endocarditis infecciosa y complicaciones relacionadas con el dispositivo. Los resultados intrahospitalarios abarcaron trombosis y embolia, perforación, taponamiento, complicaciones en el sitio de punción y relacionadas con el dispositivo.

Se analizaron 10,388 pacientes, de los cuales el 7% recibió un marcapasos sin cables y el 93% uno transvenoso. Entre 2017 y 2020, la proporción de marcapasos sin cables implantados tras el TAVR se incrementó 3.5 veces. Los pacientes con marcapasos sin cables presentaron un mayor número de comorbilidades, como fibrilación auricular y enfermedad renal terminal. Tras ajustar por factores de confusión, los pacientes con marcapasos sin cables experimentaron una menor tasa de complicaciones hospitalarias en comparación con aquellos que recibieron marcapasos transvenosos (7.2% frente a 10.1%; P = 0.014).

A mediano plazo, no se observaron diferencias significativas en la mortalidad por todas las causas (HR: 1.13; IC del 95%: 0.96-1.32; P = 0.15), hospitalización por IC (HR: 0.89; IC del 95%: 0.74-1.08; P = 0.24) o endocarditis infecciosa (HR: 0.98; IC del 95%: 0.44-2.17; P = 0.95) entre ambos grupos. Sin embargo, los marcapasos sin cables se asociaron con un menor riesgo de complicaciones relacionadas con el dispositivo (HR: 0.37; IC del 95%: 0.21-0.64; P < 0.001).

Conclusiones

El uso de marcapasos sin cables está en aumento para el tratamiento de trastornos de conducción tras el TAVR. A pesar de no observarse diferencias a mediano plazo en la mortalidad por todas las causas, los marcapasos sin cables se asociaron con una menor tasa de complicaciones intrahospitalarias y relacionadas con el dispositivo. En esta población vulnerable, donde el riesgo de complicaciones es elevado, el uso de marcapasos sin cables podría ser una opción prometedora frente a los marcapasos tradicionales.

Título Original: Comparison of Patient Outcomes Between Leadless vs Transvenous Pacemakers Following Transcatheter Aortic Valve Replacement.

Referencia: Hiroki A. Ueyama, MD et al JACC Cardiovasc Interv 2024;17:1779–1791.

Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:

https://solaci.org/2024/09/27/resultados-entre-marcapasos-sin-cable-vs-marcapasos-transvenoso-posterior-al-reemplazo-percutaneo-de-valvula-aortica/