Documento de consenso. Propuesta de abordaje y organización de las consultas de Pediatría de Atención Primaria en la pandemia por SARS-CoV-2 (otoño-invierno 2020-2021)

Resumen

La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) ha elaborado un documento con propuestas para la organización de las consultas de Atención Primaria en la próxima temporada invernal, y así poder garantizar la atención a los pacientes pediátricos, con y sin sospecha de infección por SARS-CoV-2.

En dicho documento se insiste en la importancia de que la primera valoración del paciente sea telefónica para orientar a las familias sobre la idoneidad de una visita telemática o de una visita presencial y, en caso de ser así, recibir indicaciones sobre la zona del centro de salud y horario de atención en función de los síntomas, para mantener las medidas de protección y seguridad, tanto del paciente como del personal sanitario.

AEPap y SEPEAP proponen que en los centros de salud se organicen dos circuitos, uno para atender pacientes con sospecha de infección por SARS-CoV-2 y otro circuito para valorar el resto de las patologías y llevar a cabo el Programa de Salud Infantil (PSI).

Para ello, también insta a las Administraciones públicas a mejorar las herramientas de la telemedicina para garantizar el intercambio seguro de información y así poder realizar consultas no presenciales para evitar contagios en el centro sanitario, dotar a los centros de salud de personal sanitario, administrativo y de limpieza suficiente.

También es muy importante que los profesionales sanitarios dispongan de técnicas diagnósticas para descartar las infecciones pediátricas más frecuente en época invernal (rinovirus, virus respiratorio sincitial, gripe, rotavirus) y agilizar el resultado de la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) para COVID-19 y así evitar aislamientos innecesarios.

INTRODUCCIÓN

Durante los meses de marzo a mayo, la asistencia pediátrica en Atención Primaria (AP) ha estado volcada en la atención de niños con sospecha de padecer la COVID-19, retrasando otras actividades propias de la Atención Primaria (salvo el Programa de Salud Infantil [PSI] y vacunaciones hasta los 15 meses).

Una vez superada la fase de restricción de las actividades, se ha reanudado la actividad ordinaria, habiéndose recuperado los controles de salud y las vacunaciones pendientes1.

Tras la suspensión del estado de alarma y la vuelta a la “nueva normalidad”, han surgido brotes en varias comunidades de España, afectando en algunos casos a la población infantil. Esto conlleva que debamos mantener y extremar las medidas de protección personales y hacia los niños, adolescentes y familiares que acuden a nuestras consultas ante posibles contagios, hasta que dispongamos de una vacuna eficaz.

Es previsible que, con la necesaria reapertura de los centros escolares y a pesar de las medidas de prevención, aumente el contagio de cualquier proceso infeccioso entre los menores, sobre todo en niños más pequeños, ya que es muy difícil que se mantenga la distancia social y el uso de mascarillas en todo momento. Un dato llamativo lo encontramos en un estudio que se realizó en la ciudad de Vitoria durante una huelga de guarderías y en la que se constató la disminución de las consultas en urgencias de Pediatría de forma significativa, en concreto un 43% durante ese periodo2. Algo similar hemos observado durante el confinamiento, ya que los niños se han contagiado menos de los virus propios de esta época del año.

IMPACTO DE LA COVID-19 EN LA POBLACIÓN PEDIÁTRICA

La carga de enfermedad pediátrica por COVID-19 ha sido relativamente más baja en comparación con los casos en pacientes adultos. En España, el 0,8% de los casos confirmados de COVID-19 correspondieron a personas menores de 18 años con enfermedad manifiesta, que requirieron ingreso hospitalario3. El porcentaje de casos de COVID-19 en el resto del mundo se estima entre el 1,1% y el 2,2% de la población pediátrica4,5. En el estudio de seroprevalencia, la población pediátrica afecta (o al menos con anticuerpos positivos), ha sido de casi el 4% frente al 5,2% del total de la población6.

Del mismo modo, se ha observado en algunos países que la tasa de trasmisión del niño al adulto es menor de la esperada, a diferencia de lo descrito para la enfermedad gripal. Se estima que el riesgo de contagio es mayor del adulto al niño que al revés en los menores de diez años y, a partir de diez años hay datos sobre que podrían contagiar igual que el adulto7,8.

Ahora, en pleno rebrote que estamos viendo en algunas autonomías, y pudiendo disponer de pruebas, los niños se contagian muy fácilmente en el hogar y la frecuencia en que se contagian es casi similar a la del adulto.

Abordaje pediátrico: sintomatología clínica, diagnóstico y tratamiento

La sintomatología del paciente pediátrico es inespecífica y en la mayoría de los casos, leve. Se presenta mayoritariamente en forma de infección de vías respiratorias superiores (tos, fiebre, congestión nasal, rinorrea, odinofagia). También se ha descrito, pero en menor frecuencia, dificultad respiratoria, diarrea, náuseas o vómitos, cefaleas, mialgias y pérdida de apetito. No obstante, se estima que hasta un 13% de pacientes podrían ser asintomáticos.

El porcentaje de ingreso es relativamente bajo y en la mayoría de las ocasiones relacionado con dificultad respiratoria o fiebre elevada. La mortalidad es muy baja y sobre todo asociada con comorbilidad o edad menor al año de vida. A pesar de que se han descrito cuadros graves (síndrome de dificultad respiratoria agudo, shock séptico) en niños de todas las edades, su incidencia parece ser muy baja. De especial interés para su diagnóstico es el síndrome multisistémico inflamatorio relacionado con el SARS-CoV-2. Este síndrome cursa con fiebre, afectación multiorgánica y elevación de marcadores inflamatorios9.

El periodo de incubación se estima similar al de la población adulta, con un intervalo de 2 a 14 días, y una media de diez días.

Respecto a los resultados de laboratorio en la población pediátrica, no se han reportado por el momento alteraciones específicas como en la población adulta. Las radiografías de tórax muestran infiltrados compatibles e indistinguibles de neumonía viral.

En la actualidad no se dispone de tratamiento específico. El manejo sigue siendo sintomático en AP y de detección de signos de alerta para su derivación hospitalaria. Son de especial vigilancia aquellos niños con antecedentes de enfermedad pulmonar crónica o asma moderada a grave, afecciones cardiacas graves (por ej., defectos cardiacos congénitos), inmunodeprimidos, obesidad grave, diabetes, enfermedad renal crónica en diálisis o enfermedad hepática.

Para considerar como caso confirmado de COVID-19, igual que en los adultos, requiere una prueba positiva de reacción en cadena de la transcriptasa-polimerasa inversa (PCR) para SARS-CoV-2, en una muestra obtenida con hisopo de nasofaringe (u orofaringe). Un caso probable de COVID-19 es cualquier individuo con síntomas consistentes con COVID-19 que pueda haber estado en contacto con un caso conocido de COVID-19.

Sería muy importante que se desarrollasen estudios en población infantil para observar, entre los síntomas que presentan los niños, cuáles son los más probables que correspondan a COVID-19.

Eva Suárez Vicent a, Pedro J. Gorrotxategi Gorrotxategi b, Concepción Sánchez Pina c, Carmen Villaizán Pérez d, M.ª Teresa Cenarro Guerrero e, M.ª Dolores Cantarero Vallejo f, Marianna Mambié Menéndez g, Juan Bravo Acuña h, Manuel Merino Moína h, María Garcés Sánchez i, Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y de Atención Primaria (SEPEAP)

aPediatra. CS. Burriana II. Burriana. Castellón. España.

bPediatra. CS Pasajes San Pedro. Pasajes. Guipúzcoa. España.

cPediatra. CS San Andrés. Madrid. España.

dPediatra. CS Santa Bárbara. Toledo. España.

ePediatra. CS José Ramón Muñoz Fernández. Zaragoza. España.

fPediatra. CS de Illescas . Toledo. España.

gPediatra. CS Escorxador. Palma de Mallorca. Baleares. España.

hPediatra. CS El Greco. Getafe. Madrid. España.

iPediatra. CS Nazaret. Valencia. España.

Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:

Revista de Pediatría de Atención Primaria – Propuesta de abordaje y organización de las consultas de Pediatría de Atención Primaria en la pandemia por SARS-CoV-2 (otoño-invierno 2020-2021) (pap.es)