Arteritis de Takayasu en paciente con daño valvular.
- ComiteNetMD
- 6 de enero de 2025
- Cardiología, Reumatología
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Resumen
La arteritis de Takayasu (TAK) es una vasculitis crónica, poco frecuente, de grandes vasos que afecta a la aorta y sus grandes ramas. El daño valvular no es bajo, aunque su incidencia difiere entre poblaciones, con un reporte entre el 20 a 45% con un radio mujer:hombre de 4.8 a 1.La inflamación arterial es la característica central de la enfermedad, asociada de forma variable con una respuesta sistémica de fase aguda. Se presenta el caso de una mujer de 25 años con antecedentes de atrofia renal e insuficiencia cardiaca que presentó convulsiones, se identifica discrepancia en presión arterial y pulsos periféricos de extremidades; corroborándose sospecha diagnóstica.
INTRODUCCIÓN
La arteritis de Takayasu (TAK) es una vasculitis crónica, poco frecuente, de grandes vasos que afecta a la aorta y sus grandes ramas. La TAK es predominantemente una enfermedad del adulto joven, que normalmente se presenta en la segunda y tercera década de la vida, con una prevalencia de 0,4-2,6 casos por millón de habitantes; siendo más frecuente en mujeres menores de 40 años.1 La inflamación arterial es la característica central de la enfermedad, aso-ciada de forma variable con una respuesta sistémica de fase aguda. Las lesiones inflamatorias se caracterizan por un engrosamiento de la pared arterial y frecuentemente resultan en una remodelación de la luz arterial después de la proliferación de miofibroblastos. En la mayoría de las series, el 90% de los pacientes padecen estenosis arteriales y hasta un 25% enfermedad aneurismática.2Los primeros síntomas son inespecíficos y un diagnóstico precoz es difícil y requiere conciencia y sospecha clínica. Su forma de presentación incluye síntomas constitucionales, carotidinia, hipertensión arterial, pulsos periféricos disminuidos o ausentes. El diagnóstico temprano es importante para prevenir daños graves a los órganos terminales, incluidos accidentes cerebrovasculares y cardiopatía isquémica.3 Estos pacientes a menudo presentan aumento de los marcadores inflamatorios, incluida la proteína C reactiva y la velocidad de sedimentación glo-bular, pero la respuesta inflamatoria sistémica no siempre muestra una correlación positiva con la actividad inflamatoria en la pared del vaso.4 Por tanto, los estudios de imagen juegan un papel principal en el diagnóstico y con-trol de la enfermedad.5Los glucocorticoides siguen siendo los más eficaces y sirven como tratamiento fundamental de primera línea. Los fármacos inmunosupresores también desempeñan un papel importante entre los que se incluyen metotrexato, azatioprina, leflumonida o micofenolato mofetilo.6,7 Sin embargo, se ha reportado el beneficio de la terapia biológica en diversos estudios; donde los inhibidores del factor de necrosis tumoral-α (TNF-α) y del receptor de IL-6 (toci-lizumab) en pacientes con TAK que eran refractarios a otras terapias inmunosupresoras mostraron beneficios.
Zambrano-Castro D.,1 Delgado-Salas A.,1 Martínez-Pérez J.,2López-Martínez R.2
1Medicina Interna, Hospital Luis Vernaza-Universidad Espíritu Santo.Guayaquil, Ecuador.
2Servicio de Reumatología, Hospital Luis Vernaza.Guayaquil, Ecuador.
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https://reumatologiaaldia.com/index.php/rad/article/view/8578/7188