Brasil elimina la filariasis linfática como problema de salud pública

1 de octubre de 2024

La Organización Mundial de la Salud (OMS) felicita a Brasil por haber eliminado la filariasis linfática como problema de salud pública.

“Eliminar una enfermedad es un logro trascendental que requiere un compromiso inquebrantable”, afirmó el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. “Felicito a Brasil por sus esfuerzos para liberar a su pueblo del flagelo de esta dolorosa, desfigurante, discapacitante y estigmatizante enfermedad. Esto es otro ejemplo del increíble progreso que hemos logrado contra las enfermedades tropicales desatendidas y brinda esperanza a muchas otras naciones que aún luchan contra la filariasis linfática de que también pueden eliminar esta enfermedad”.

La filariasis linfática, comúnmente conocida como elefantiasis, es una enfermedad parasitaria debilitante transmitida por mosquitos. Durante siglos, esta enfermedad ha afectado a millones de personas en todo el mundo, causando dolor, hinchazón crónica y grave, discapacidad grave y estigmatización social.   

Inversiones efectivas a nivel de país

En las últimas décadas, Brasil ha implementado acciones integradas para eliminar la filariasis linfática, como la elaboración de un plan nacional para combatir esta enfermedad en 1997, la distribución masiva de medicamentos antiparasitarios, actividades de control de vectores y una vigilancia estricta, especialmente en las zonas más afectadas. Con estos esfuerzos, el país logró poner fin a la transmisión de la enfermedad en 2017.

La eliminación de la filariasis linfática también fue uno de los objetivos del programa Brasil Saudável, una iniciativa multisectorial dirigida a poner fin a las enfermedades determinadas socialmente con un enfoque de todo el gobierno y la participación de la sociedad civil, incluida la participación de las personas afectadas en la implementación de los esfuerzos de control de la enfermedad. El programa fue lanzado en febrero de 2024 por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en una ceremonia con la participación del Director General de la OMS, y el doctor Jarbas Barbosa, Director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y Director Regional de la OMS para las Américas.

En la fase posterior a la eliminación, Brasil, la OPS y la OMS seguirán vigilando de cerca la posible reaparición de infecciones.

“Este hito es el resultado de años de dedicación, trabajo duro y colaboración entre los trabajadores de la salud, los investigadores y las autoridades de Brasil”, dijo el doctor Barbosa. “El extenso y unificado sistema de salud de Brasil, junto con la sólida experiencia especializada en laboratorio y la sólida vigilancia, fueron esenciales para interrumpir la cadena de transmisión, inspirando a otros países a avanzar hacia la eliminación de la filariasis linfática y otras enfermedades tropicales desatendidas”.

Progreso global

A nivel mundial, Brasil se une a otros 19 países y territorios del mundo que han sido validados por la OMS por haber eliminado la filariasis linfática como problema de salud pública. Estos son Malawi y Togo en la región Africana; Egipto y Yemen en el Mediterráneo Oriental; Bangladesh, Maldivas, Sri Lanka y Tailandia en el Sudeste Asiático; y Camboya, Islas Cook, Kiribati, República Democrática Popular Lao, Islas Marshall, Niue, Palau, Tonga, Vanuatu, Viet Nam y Wallis y Futuna en la Región del Pacífico Occidental.

En las Américas, tres países endémicos (República Dominicana, Guyana y Haití) aún requieren administración masiva de medicamentos para detener la transmisión y están trabajando para alcanzar el objetivo de eliminación.

Además de ser el vigésimo país validado para la eliminación de la filariasis linfática como problema de salud pública, Brasil se ha convertido también en el quincuagésimo tercer país que ha eliminado al menos una ETD a nivel mundial.

La filariasis linfática, comúnmente conocida como elefantiasis, es una enfermedad tropical desatendida. La infección se produce cuando los parásitos se transmiten a los humanos a través de los mosquitos. La infección se adquiere generalmente en la infancia y causa daños ocultos en el sistema linfático.

Las dolorosas y desfigurantes manifestaciones visibles de la enfermedad – linfedema, elefantiasis e hinchazón escrotal – se producen más tarde en la vida y pueden provocar una discapacidad permanente. Estos pacientes no sólo están discapacitados físicamente, sino que sufren pérdidas mentales, sociales y financieras que contribuyen al estigma y la pobreza.

La eliminación de la filariasis linfática es posible deteniendo la propagación de la infección mediante la quimioterapia preventiva. La estrategia de quimioterapia preventiva recomendada por la OMS para la eliminación de la filariasis linfática es la administración masiva de medicamentos. Esto consiste en administrar una dosis anual de medicamentos a toda la población en riesgo. Los medicamentos utilizados tienen un efecto limitado sobre los parásitos adultos, pero reducen eficazmente la densidad de microfilarias en el torrente sanguíneo y previenen la propagación de los parásitos a los mosquitos.

En 2023, 657 millones de personas en 39 países y territorios vivían en zonas que requieren quimioterapia preventiva para detener la propagación de la infección. En las Américas, Costa Rica, Suriname y Trinidad y Tobago fueron eliminados de la lista de la OMS de países endémicos de filariasis linfática en 2011.

La hoja de ruta 2021-2030 para las enfermedades tropicales desatendidas establece como objetivo la prevención, el control, la eliminación y la erradicación de 20 enfermedades y grupos de enfermedades para 2030. Los progresos realizados contra la filariasis linfática y otras enfermedades tropicales desatendidas alivian la carga humana y económica que imponen a las comunidades más desfavorecidas del mundo.

https://www.who.int/es/news/item/01-10-2024-brazil-eliminates-lymphatic-filariasis-as-a-public-health-problem