Clase de antibióticos muestra promesa para tratar cierto tipo de demencia
- netmd
- 29 de enero de 2020
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10 de enero de 2020
En un estudio publicado en la revista Human Molecular Genetics, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Kentucky (Estados Unidos) hallaron que una clase de antibióticos denominados aminoglucósidos podrían fungir como un tratamiento prometedor para la demencia frontotemporal.
El trabajo fue un esfuerzo colaborativo entre la citada institución, el Departamento de Bioquímica Molecular y Celular del Reino Unido y el Departamento de Patología de la Universidad de California en San Francisco.
La demencia frontotemporal es el tipo más común de demencia de inicio temprano y la segunda demencia más común después de la enfermedad de Alzheimer. Por lo general, inicia entre las edades de 40 y 65 años y afecta los lóbulos frontales y temporales del cerebro, propiciando cambios de comportamiento, dificultad para hablar y escribir y deterioro de la memoria.
Un subgrupo de pacientes con demencia frontotemporal posee una mutación genética específica que impide que las células cerebrales produzcan una proteína llamada progranulina. Aunque la progranulina no se ha sido comprendida a plenitud, su ausencia se relaciona con la enfermedad.
El equipo de científicos, dirigido por Haining Zhu, profesor en el Departamento de Bioquímica Molecular y Celular del Reino Unido, encontró que después de añadir antibióticos aminoglucósidos a las células neuronales con esta mutación, tales células comenzaron a producir la proteína progranulina en su totalidad y omitiendo la mutación.
“Las células cerebrales de estos pacientes tienen una mutación que impide que se produzcan progranulina. El equipo descubrió que al agregar una pequeña molécula de antibiótico a las células, es posible ‘engañar’ a la maquinaria celular para que la produzca“, señaló Matthew Gentry, coautor del estudio y profesor en el Departamento de Bioquímica Molecular y Celular.
Los investigadores hallaron que dos antibióticos aminoglucósidos específicos, la gentamicina y el G418, fueron efectivos para reparar la mutación y producir la proteína funcional progranulina. Tras agregar moléculas de Gentamicina o G418 a las células afectadas, el nivel de proteína progranulina se recuperó hasta aproximadamente un 50 a 60%.
Dichos resultados serían prometedores para el desarrollo de fármacos, pues en la actualidad no existen terapias efectivas para ningún tipo de demencia.
Después de este estudio preclínico de prueba de concepto, el siguiente paso es estudiar los efectos de los antibióticos en ratones con la mutación causante de demencia frontotemporal, apuntó Zhu. Otro enfoque potencial es desarrollar nuevos compuestos de Gentamicina y G418 que podrían ser más seguros y efectivos. Aunque la gentamicina es un medicamento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), su uso clínico es limitado, ya que está asociado con una serie de efectos secundarios adversos.
“Si podemos obtener los recursos y el médico adecuados para trabajar, podríamos reutilizar este medicamento. Esta es una etapa temprana del estudio, pero aporta una prueba importante del concepto de que estos antibióticos aminoglucósidos o sus derivados podrían funcionar como una vía terapéutica para la demencia frontotemporal“, concluyó Zhu.
