¿Como Mejorar la Prescripción de Inhibidores de la Bomba de Protones junto a la Doble Antiagregación Plaquetaria en Síndromes Coronarios Agudos?
- netmd
- 27 de enero de 2023
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05 de enero de 2023
El síndrome coronario agudo (SCA) representa una de las principales causas de morbimortalidad con gran impacto en los recursos y gastos sanitarios. La doble antiagregación plaquetaria (DAP) recomendada en pacientes con SCA se asocia con un riesgo aumentado de sangrado gastrointestinal, que se observa en el 1.2-2.4% de los pacientes y se asocia con un aumento de la mortalidad 5 veces superior a los 30 días y 4 veces superior al año.
Las guías de práctica clínica de la Sociedad Europea de Cardiología recomiendan que los pacientes tratados con DAP reciban un inhibidor de la bomba de protones (IBP), con el objetivo de reducir el riesgo de sangrado digestivo.
Tamilola Jinadu y cols. evaluaron en un periodo de dos semanas el cumplimiento de esta recomendación en la planta de cardiología de una unidad cardiológica terciaria de Inglaterra.
Se incluyeron 45 pacientes con diagnóstico confirmado de SCA que recibieron DAP, de los cuales solo el 56% se encontraba bajo tratamiento con IBP.
Posteriormente, idearon y llevaron a cabo un proyecto de mejora de mejora continua, con el objetivo de mejorar la prescripción concomitante de IBP y alcanzar el 100% de cumplimiento de las directrices.
Realizaron intervenciones de bajo costo que incluían sesiones educativas para médicos en formación, personal de enfermería y farmacéuticos, así como posters que servían como indicaciones visuales para los médicos que otorgaban el alta hospitalaria.
Además, pusieron en marcha un protocolo para que el equipo de farmacia verificara la administración del régimen de tratamiento, previo al alta. De este modo se crearon múltiples controles por parte de médicos en formación, enfermeras y farmacéuticos para lograr el objetivo.
Como consecuencia de esto, el 100% de los pacientes que recibían DAP se les recetó un IBP en las catorce semanas siguientes al inicio de la intervención.
Esta mejora se mantuvo con el ingreso de nuevos médicos en formación.
Los autores resaltan que intervenciones de este tipo deberían considerarse para ayudar a reducir el riesgo de sangrado digestivo en esta población.
Alfonsina Candiello
FUENTE: MedEcs