Día mundial de la retinosis pigmentaria: 29 de Septiembre 2018

Investigan en La Fe un tratamiento para frenar la ceguera por retinosis pigmentaria

La retinosis pigmentaria, principal causa de ceguera en el primer mundo

Una de las enfermedades raras más desconocidas es la retinosis pigmentaria (RS), una distrofia hereditaria de la retina ocasionada por la pérdida de fotorreceptores. Es la causa más importante de ceguera en el primer mundo y, con origen genético, afecta a la retina a la hora de responder a la luz. A día de hoy no tiene tratamiento, y la única vía de actuación solo permite el retraso de la ceguera.

Los síntomas son diversos. El primero de ellos, y el más frecuente, es la ceguera nocturna, que imposibilita la visión completa. Seguida de una pérdida gradual del campo visual periférico durante la noche debido a la muerte de las células de la retina. Ambos efectos terminan por producir la invidencia después de varias décadas.

A raíz de ello nace el Proyecto Nutranet, un ensayo clínico que trabaja las causas y consecuencias de la retinosis pigmentaria. La enfermedad, que se impone en 1 por cada 4.000 sujetos, se inicia entre los 10 y los 30 años. En España son 15.000 personas las que la padecen.

El ensayo clínico con los pacientes de retinosis pigmentaria está llevado a cabo por el Instituto de Investigación Sanitaria La Fe, junto a la financiación del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, y actualmente están concluyendo la primera fase del estudio, protagonizada por 30 afectados. Los pacientes han experimentado en primera persona la acción terapeútica y para ello han tomado vía oral, durante dos años, nutraceúticos (compuestos o sustancias naturales que tienen tratamiento) con propiedades antioxidantes. El objetivo de la terapia farmacológica es ralentizar y retrasar la progresión de la ceguera. “Mientras se mueren las células hay sustancias tóxicas en el ambiente que pueden favorecer la muerte de estas. Con nuestras terapias buscamos eliminar dichas sustancias”, expone Regina Rodrigo, doctora en el Instituto de Investigación Sanitaria La Fe.

Antes de probarse el tratamiento con humanos, tuvo su resultado en células y animales. Concretamente en ratones, que “han parecido tener un efecto beneficioso”, destaca Rodrigo.

En cuanto al rendimiento en humanos, es un proceso a largo plazo del cual se espera obtener resultados el próximo año. A lo que la doctora añade: “Hay pacientes que han tomado placebo y otros nutraceúticos, hay que analizar cada caso”.

IRIS MONTOYA

http://cadenaser.com/emisora/2018/02/25/radio_valencia/1519549105_146872.html