El paciente pediátrico debe asumir un rol activo en el tratamiento del dolor crónico

01/02/2019

La Cátedra de Dolor Infantil Universitat Rovira i Virgili – Fundación Grünenthal ha organizado, junto al Hospital Universitario La Paz y al Grupo de Trabajo de Dolor Infantil de la Sociedad Española del Dolor (SED), la III Jornada nacional sobre Dolor Infantil

El paciente pediátrico hospitalizado se encuentra fuera de su medio habitual y sufre distintas formas de estrés físico y psicológico por la separación de su entorno, la enfermedad o debido a la intervención quirúrgica. Por ello, la III Jornada Nacional sobre Dolor Infantil organizada por la Cátedra de Dolor Infantil Universitat Rovira i Virgili – Fundación Grünenthal, el Hospital Universitario La Paz y al Grupo de Trabajo de Dolor Infantil de la Sociedad Española del Dolor (SED), ha puesto de relieve la necesidad de buscar medidas que faciliten el abordaje del dolor infantil al tiempo que se han presentado las novedades farmacológicas y se ha actualizado el conocimiento sobre el manejo del dolor neuropático, entre otros aspectos.

Durante la jornada se ha hecho hincapié en la figura del paciente pediátrico como agente activo en su tratamiento. Las primeras experiencias dolorosas en niños pueden contribuir significativamente a los mecanismos de afrontamiento cuando son adultos. Por esta razón “deben aprender a responsabilizarse de su estado de salud desde edades tempranas. Esto es particularmente importante en el caso del dolor crónico, en el que se deben conocer las formas más adecuadas de afrontamiento, actitudes alternativas y un funcionamiento personal más dinámico”, ha asegurado el director de la Cátedra y coordinador del Grupo de Trabajo de Dolor Infantil de la SED, el profesor Jordi Miró. Para ayudar a que asuman este rol, en los programas de tratamiento para el dolor crónico se promueve la figura de los cuidadores como responsables de facilitar este proceso y de reforzar el cambio de actitud.

“Es conveniente distinguir entre el abordaje del dolor agudo y el crónico”, así lo ha resaltado el doctor Miró, ya que mientras en el primer caso la situación es positiva, no sucede lo mismo con el dolor crónico. “Aunque afortunadamente contamos con grandes profesionales, muy preocupados por ayudar a los niños y sus familias, el sistema no acompaña sus iniciativas; no pone los recursos que cabría esperar. No estamos hablando de grandes infraestructuras, sino de procedimientos y protocolos que ya sabemos que funcionan”, ha destacado el director de la Cátedra, quien sugiere que se debe facilitar la incorporación de los progresos que se han producido en los últimos veinte años para avanzar en el tratamiento del dolor crónico infantil.

En este sentido, es clave, en palabras del Prof. Miró, que el desarrollo de nuevos estudios que ayuden a promover su visibilización en la práctica clínica: “La investigación es imprescindible pues nos permite generar conocimiento, que es necesario para progresar. Precisamente, una de las líneas de investigación más activas, a la vez que interesantes, implica contrastar la eficacia de los tratamientos e identificar cuál es el más adecuado para cada paciente y bajo qué circunstancias”.

Una guía sobre dolor gana la V edición del Premio a la labor Contra el Dolor Infantil

El V Premio a la labor Contra el Dolor Infantil ha recaído sobre el doctor Jesús Cebrián por la elaboración de una guía de dolor pediátrico como instrumento de mejora en el niño hospitalizado que se ha implementado en el Hospital General Gregorio Marañón de Madrid. Este modelo ha demostrado tener una repercusión positiva en aspectos como la incidencia general, detección, evaluación, valoración de la intensidad y aplicación del tratamiento correcto.

El doctor Cebrián ha explicado que la novedad fundamental reside en el planteamiento de las acciones. Primero se realizó una labor de detección del problema en cuanto a la prevalencia, evaluación, diagnóstico y tratamiento. A continuación, se elaboró una guía multidisciplinar basada en las recomendaciones de la Joint Commission, que implica actuaciones concretas y responsabilidades definidas en la atención del dolor del niño en todo el personal sanitario del hospital infantil (médicos, enfermeras, supervisoras, farmacéuticos). Por último, se evaluó el resultado de la acción de mejora al año de la introducción de la guía.

Según este experto, el reto en el tratamiento del dolor en el niño hospitalizado radica en desarrollar una secuencia de actuaciones farmacológicas y no farmacológicas que impliquen a todo el personal sanitario, y que recojan la prevención, evaluación, medición y tratamiento del dolor en todo momento con el fin de evitar la presencia del dolor relevante. En este sentido, “en un hospital infantil moderno es imprescindible que se humanice la estancia mediante una presencia parental cercana”, ha asegurado la el doctor Cebrián.

En esta quinta edición del premio también se han destacado dos trabajos finalistas. ‘Unidad de Tratamiento de Dolor de Valladolid’ presentado por el Dr. Israel Cuenca García y la Dra. Alba Herrero García la del Hospital Clínico Universitario Río Hortega de Valladolid, como primer finalista, y en segundo lugar, ‘Evaluación del dolor en atención paliativa en niños y adolescentes con enfermedad oncológica’, de Lucía Navarro Marchena de Unidad de Cuidados Paliativos Pediátricos del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona).

https://www.vademecum.es/noticia-190201-El+paciente+pedi+aacute+trico+debe+asumir+un+rol+activo+en+el+tratamiento+del

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