Enfermedad de Graves-Basedow e hiperplasia tímica: una asociación que no nos debe extrañar
- netmd
- 7 de junio de 2019
- Endocrinología y Diabetes
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RESUMEN
El aumento del tamaño del timo asociado a hiperplasia tímica (HT) es frecuente en los pacientes con enfermedad de Graves-Basedow (EGB), si bien es poco habitual detectarla en la práctica clínica diaria. Presentamos el caso de una mujer de 38 años con EGB, a quien se le detectó de manera incidental un aumento del timo. La paciente no tenía síntomas compresivos locales y la tomografía computarizada demostró engrosamiento homogéneo de mediastino anterior sugestivo de HT. Durante la evolución, se evidenció reducción del tamaño tras el control de la función tiroidea con fármacos antitiroideos. La presencia de algunas características radiológicas como aumento difuso y homogéneo de la glándula, ausencia de invasión de estructuras vecinas, calcificaciones o imágenes quísticas, sugiere la presencia de una HT. En estos casos, el tratamiento del hipertiroidismo y un control expectante son actitudes razonables. Conocer esta evolución puede evitar intervenciones diagnósticas o terapéuticas innecesarias
Introducción
La hiperplasia tímica (HT) en presencia de enfermedad Graves-Basedow (EGB) es una asociación frecuente, sin embargo es inusual detectarla en la práctica clínica1 , siendo también excepcional que se aborde en revisiones sobre esta enfermedad2 . Por otro lado, su detección, cuando se presenta, ocasiona cierto grado de inquietud tanto al profesional que lo atiende como al paciente que lo padece, al plantearse dudas sobre qué actitud seguir. Presentamos un caso de EGB e HT recientemente tratado en nuestro departamento, discutimos su evolución y revisamos la literatura al respecto, intentando dar los aspectos claves en su abordaje clínico.
Caso clínico
Se trata de una mujer de 38 años de edad, de etnia europea, que es derivada a la consulta de Endocrinología para valoración de un cuadro de hipertiroidismo. Entre los antecedentes personales destaca un parto vaginal cinco meses antes de consultar. En la anamnesis refería clínica de tres meses de evolución consistente en astenia, pérdida de peso (4 kg), nerviosismo, palpitaciones, insomnio e intolerancia al calor. La paciente no presenta sintomatología local compresiva. En la exploración física destacaba: IMC 22,7 kg/m2 , frecuencia cardíaca a 104 latidos por minuto y rítmica, glándula tiroidea aumentada de manera difusa (grado Ib de la OMS) sin nódulos palpables. No signos oculares de orbitopatía tiroidea autoinmune….
Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:
http://www.raem.org.ar/numeros/2018-vol55/numero-02/vol55-02-004.pdf