Funciones Ejecutivas en Adultos Mayores con Enfermedad de Parkinson: Revisión Sistemática de la Literatura
Resumen
El objetivo principal de la investigación es analizar sistemáticamente la evaluación neuropsicológica y el rendimiento de las funciones ejecutivas en adultos mayores diagnosticados con la enfermedad de Parkinson. Se realizó una Revisión Sistemática de la Literatura examinando bases de datos multidisciplinarias: PubMed, SCOPUS, Scielo, Cochrane y APA Psycnet entre los años 2015-2021. Se utilizaron términos de búsqueda a través de tesauros DeCS y MeSH y un operador booleano, tomando en cuenta dos estrategias de búsqueda. La búsqueda arrojo 703 resultados, que fueron tamizados y filtrados dando como resultado 20 estudios para la revisión. El análisis de información se efectuó con estadística descriptiva. Entre los principales resultados se establece que el 45% de los estudios fueron realizados en Europa, 25% en Latinoamérica. La evaluación neuropsicológica de las funciones ejecutivas se realiza en conjunto con otras variables como el estado cognitivo, funcionamiento motor y estado emocional-afectivo. Los instrumentos de mayor interés al momento de evaluar este dominio fueron el Test de Fluidez Verbal y la Batería de Evaluación Frontal (FAB). Se evidenció bajo rendimiento en tareas relacionadas con fluidez léxica, alteraciones en la flexibilidad cognitiva, control inhibitorio, sensibilidad a la interferencia y planificación.
Introducción
La enfermedad de Parkinson (EP) fue inicialmente descrita en 1817 por James Parkinson. En la actualidad es considerada como la segunda enfermedad neurodegenerativa más común luego del Alzheimer y se estima que su prevalencia aumenta conforme la edad y afecta al 1% de la población mundial mayor a 60 años (Tysnes y Storstein, 2017).
Se ha asociado el origen de la EP a la perdida prematura de neuronas dopaminérgicas en la sustancia negra pars compacta (SNpc) y otros núcleos, al mismo tiempo se presentan daños en otras áreas del sistema nervioso y perdida de neuronas no dopaminérgicas (Saavedra et al., 2019).
La EP es una enfermedad neurodegenerativa progresiva caracterizada por síntomas motores y no motores, los mismos que pueden presentarse de manera variable y con diversos niveles de severidad. Entre las principales alteraciones motoras se evidencia: bradicinesia, temblor en reposo, rigidez e inestabilidad postural. Los síntomas no motores incluyen modificaciones a nivel sensorial, psiquiátrico, emocional, del sueño, conductual y síntomas cognitivos. De igual forma, se estima que entre 20 y 57% de pacientes con EP desarrollan deterioro cognitivo leve y un porcentaje similar demencia asociada a la EP, el cual aumenta por la misma patología (Cerezo, 2019; Jurado et al., 2014).
La sintomatología cognitiva es diversa e implica un sinnúmero de alteraciones, se ha descrito especialmente disfunción ejecutiva, deterioro en las funciones visoespaciales, déficit atencional, enlentecimiento de la velocidad de procesamiento y cambios en la memoria y lenguaje que guardan relación con dominios ejecutivos, todos estos cambios pueden presentarse desde etapas iniciales de la EP y generar deterioro en la calidad de vida (Guevara y Morales, 2017).
Cerezo (2019) menciona que el deterioro en las funciones ejecutivas (FE) suele aparecer desde el inicio de la enfermedad y progresa con la misma, concibiendo a la corteza prefrontal como el correlato neuroanatómico o la región donde se desarrollan las FE. Se puede entender a las FE como el grupo de capacidades cognitivas superiores necesarias para el comportamiento dirigido a objetivos (Morales-Millán et al., 2021). Las mismas comprenden el control inhibitorio, flexibilidad cognitiva, resolución de problemas, planificación, regulación emocional, realización de tareas duales y manipulación de la información mediante la memoria de trabajo (Sira y Mateer, 2014). La alteración en las FE puede desencadenar diversos problemas y limitaciones alterando la calidad de vida del adulto mayor y cuidador.
Debido a la variedad de síntomas y cambios neuropsicológicos que se presentan alrededor de la EP y puesto que afecta potencialmente a adultos mayores y familias es importante realizar evaluaciones oportunas que permitan identificar los déficits y generar tratamientos integrales e idóneos.
Se han propuesto diversas pruebas que evalúan varios ámbitos cognitivos, sin embargo, es trascendental identificar que pruebas son las idóneas o más utilizadas al momento de explorar el rendimiento neuropsicológico de las funciones ejecutivas en la EP, dominio principalmente afectado.
Por lo expuesto anteriormente, el objetivo principal de la presente investigación es analizar sistemáticamente la evaluación neuropsicológica y el rendimiento de las funciones ejecutivas en adultos mayores diagnosticados con la enfermedad de Parkinson.
Samantha Cristina Quishpe-Santillán
Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador
Psicóloga Clínica, Maestrada en Neuropsicología e Investigación, Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador.
Jorge Fabián Guapisaca-Juca
Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador
Médico Geriatra, Docente de la Facultad de Medicina y tutor de la Maestría en Neuropsicología e Investigación, Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador.
Gladys Alexandra Bueno-Pacheco
Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador
Magister en Diagnostico y Rehabilitación Neuropsicológica, PhD en Psicogerontología, Docente Investigadora, Universidad del Azuay, Cuenca, Ecuador.
Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:
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