Hallan que prueba de detección para VPH puede identificar antes el cáncer cervicouterino
- netmd
- 7 de agosto de 2018
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4 de julio de 2018
Un estudio concretado por investigadores canadienses, que se publicó esta semana en la revista Journal of the American Medical Association (JAMA), dio a conocer que la prueba de detección del virus del papiloma humano (VPH) puede identificar los cambios precancerosos de las células del cuello uterino antes y con mayor precisión que la citología de Papanicolaou.
La investigación fue encabezada por la doctora Gina Suzanne Ogilvie, del Centro de Salud y Hospital de Mujeres de Vancouver, en Canadá, el cual implicó la revisión de los datos de unas 19,000 mujeres a lo largo de una década.
El trabajo revela que la prueba del virus del papiloma humano es más sensible que la de Papanicolaou, un examen ampliamente utilizado que durante décadas viene siendo el procedimiento estándar para prevenir la aparición del cáncer cervicouterino.
El VPH es la infección de transmisión sexual más común entre las personas, cuyo sistema inmune suele eliminar el virus en el plazo de uno o dos años, pero cuando la infección persiste, puede derivar en lesiones precancerosas o incluso en tumores malignos. Asimismo, casi todos los casos de cáncer de cuello uterino se deben a infecciones causadas por el virus del papiloma humano.
A medida que los expertos han ido aprendiendo más sobre el papel del VPH en dicho cáncer, se ha visto un incremento en el número de médicos que recomiendan a las mujeres someterse más a la prueba del VPH y menos a la citología, una prueba microscópica de células tomadas por raspado de la abertura del cérvix.
No obstante y según Ogilvie, en lugar de descartarse el Papanicolaou, esta prueba debe complementar a la prueba del papiloma. “El beneficio real de la prueba conjunta es junto con la prueba de VPH”, dijo la también investigadora de la Universidad de Columbia Británica, en Vancouver.
La Sociedad Americana del Cáncer estima que este año se diagnosticarán unos 13,200 nuevos casos de cáncer de cuello uterino invasivo en Estados Unidos, y que alrededor de 4,200 mujeres morirán por esta enfermedad.