Investigación sobre el hipotiroidismo: Un esfuerzo a largo plazo
- netmd
- 20 de septiembre de 2021
- Endocrinología y Diabetes
- 0 Comments
Nuevo estudio analiza a pacientes con enfermedad renal y tiroides hipoactiva
El hipotiroidismo puede ser una enfermedad complicada. Generalmente requiere medicación diaria, y en los casos más graves, cirugía. Además, muchas personas con hipotiroidismo tienen otras afecciones, como diabetes, enfermedad celíaca, lupus, anemia y síndrome de Sjogren.
Otra es la enfermedad renal crónica, que en algunos pacientes puede estar relacionada con el hipotiroidismo. La enfermedad renal crónica hace que los riñones fallen, y esto dificulta la filtración de residuos y agua de la sangre. Las personas que tienen esta enfermedad suelen necesitar medicamentos o un tratamiento más avanzado para ayudarles a filtrar estos residuos.
Un estudio apoyado por el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés) está investigando a pacientes con enfermedad renal crónica e hipotiroidismo.
El estudio a cinco años comenzó en 2019 y tiene 336 participantes. Se está estudiando si la levotiroxina, un medicamento para tratar el hipotiroidismo aumentando las hormonas tiroideas, promueve la salud general y la calidad de vida de los pacientes en hemodiálisis. La hemodiálisis es un tratamiento para las personas con enfermedad renal crónica. Durante la hemodiálisis, los residuos y el agua se filtran de la sangre mediante una máquina llamada dializador. Luego la sangre se envía de vuelta al cuerpo.
Los investigadores también quieren averiguar si la levotiroxina mejora la salud cardiovascular de estos pacientes.
Además de estudiar la enfermedad renal crónica, el NIDDK tiene estudios en curso que hacen un seguimiento a largo plazo de los pacientes con hipotiroidismo. Uno de estos estudios (en inglés), que está activo desde 1977, se centra en personas con todo tipo de problemas de tiroides, entre ellos, el hipotiroidismo. Los participantes se hacen controles y pruebas regulares. Los investigadores utilizan estos datos para mejorar las formas de tratar los problemas de tiroides y comprender mejor la genética de las afecciones tiroideas.