Linfadenectomía lumboaórtica en seminoma en estadio II A-B: evaluando opciones menos tóxicas. Revisión no sistemática
- ComiteNetMD
- 15 de noviembre de 2024
- Oncología Médica, Urología
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Resumen
El cáncer testicular es una neoplasia maligna poco común, pero significativa en los hombres. La mayoría de los tumores son de células germinales, siendo el más frecuente el seminoma. Los tratamientos tradicionales para el seminoma en estadio II incluyen quimioterapia y radioterapia, con altas tasas de curación, pero también asociados a toxicidad a corto y largo plazo, como la aparición de nuevos tumores y enfermedades cardiovasculares. En busca de tratamientos menos tóxicos, la linfadenectomía lumboaórtica (LALA) se ha planteado como una alternativa terapéutica en los últimos años para el seminoma en estadio II A-B, considerando sus buenos resultados oncológicos en no seminomas en los mismos estadios, y demostrando resultados prometedores en el tratamiento local con la ventaja de una baja tasa de complicaciones. El objetivo de esta revisión es analizar los resultados oncológicos y funcionales de la LALA como tratamiento primario para el cáncer testicular de tipo seminoma en estadio II A-B de acuerdo con los estudios prospectivos publicados. Dentro de los resultados de los tres estudios prospectivos analizados destaca el reporte de una sobrevida libre de recurrencia del 70-90% y una tasa de complicaciones posoperatorias del 8-13%. Es preciso realizar estudios de mayor volumen en los que se puedan determinar posibles factores de riesgo y seleccionar adecuadamente a los pacientes.
Introducción
El cáncer testicular representa el 1-1.5% de las neoplasias malignas, ocupando el séptimo lugar de los cánceres en el hombre. El 90-95% de los tumores provienen de células germinales, y dentro de estos, el seminoma es el tipo histológico más prevalente. Aproximadamente el 20% de los hombres con seminoma son diagnosticados en etapa II, caracterizada por enfermedad retroperitoneal de bajo volumen, con linfonodos de hasta 5 cm1,2. El tratamiento en esta etapa consiste en 3-4 ciclos de quimioterapia (QT) con bleomicina, etopósido y cisplatino, o radioterapia (RT) con 30 a 36 Gray3. Estos tratamientos son altamente efectivos, con una tasa de curación del 90-92% con RT y del 87-100% con QT. Se reporta una sobrevida libre de recaída a 5 años del 91%, el 89% y el 83% para pacientes tratados con RT en etapa II A y II B, y con QT en etapa II B, respectivamente4. Sin embargo, en los últimos años se ha demostrado un incremento en la morbimortalidad a largo plazo asociada a la toxicidad que conllevan estas terapias, destacando la aparición de nuevos tumores sólidos y la enfermedad cardiovascular. Se ha observado un riesgo relativo (RR) de 2,0-3,7 post-QT y de 1,5-4,4 post-RT para la aparición de nuevos tumores sólidos, siendo los más frecuentes los cánceres de intestino delgado, vejiga e hígado. Además, con la QT se reporta aumento de cáncer hematológico, con un RR de 5,1 para leucemia5. Otras toxicidades reportadas son el aumento del riesgo cardiovascular (RR 2,59 post-QT y 2,40 post-RT), síndrome metabólico (odds ratio: 2,2), diabetes mellitus (RR 2,3 post-RT y 2,6 post-QT), nefrotoxicidad, infertilidad, toxicidad pulmonar y neurotoxicidad, entre otros6–8. Se reporta un índice de mortalidad observada versus esperada que varía entre 1,6 y 2,0 en pacientes tratados con QT o RT9.
Por esto mismo, y considerando que la mayoría de los pacientes con cáncer testicular son jóvenes, el enfoque actual se centra en ofrecer un tratamiento con un perfil de baja toxicidad a largo plazo. La aparición de plantillas bilaterales o unilaterales modificadas, técnicas de conservación nerviosa y la cirugía mínimamente invasiva han permitido plantear la linfadenectomía lumboaórtica (LALA) como tratamiento local del seminoma en estadio II A-B, con la ventaja de tener una baja tasa de complicaciones, limitadas principalmente a disfunción eyaculatoria. En la actualidad, se reportan tasas del 93-97% de pacientes que permanecen con eyaculación anterógrada y del 73% con fertilidad conservada10,11.
La LALA ya está bien establecida como tratamiento primario en el cáncer testicular de tipo no seminoma I-II B con marcadores negativos, presentando una tasa de curación del 80% con un riesgo de recaída a 5 años menor del 30% (12-40%), siendo la mayoría de las recurrencias fuera del retroperitoneo12–14.
El objetivo de este estudio es realizar una revisión de la literatura para analizar los resultados oncológicos y funcionales de la LALA como tratamiento primario para el cáncer testicular de tipo seminoma en estadio II A-B.
Mario Hassi-Roman1,2, Sofía Hermosilla-Fontaine3, Raimundo Domínguez-Argomedo1,2, Nelson Orellana-Salinas1, Matías Rozental-De Mayo1 y Marcelo Kerkebe-Lama1,4
1Departamento de Urología, Hospital Dipreca;
2Departamento de Urología, Hospital Félix Bulnes;
3Facultad de Medicina, Universidad de los Andes;
4Servicio de Urología, Cirugía Robótica y Mínimamente Invasiva, Clínica MEDS. Santiago, Chile
Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:
https://www.revistachilenadeurologia.com/frame_esp.php?id=26#