Reemplazo valvular aórtico transcatéter (RVAT): manejo perioperatorio y consideraciones anestésicas
- netmd
- 12 de agosto de 2021
- Anestesiología
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Resumen
Cada vez es más frecuente el reemplazo valvular aórtico trans-catéter (RVAT) y, por ende, la necesidad de su adecuado manejo perioperatorio. Los nuevos dispositivos han disminuido sus complicaciones y, por lo tanto, aumentado su indicación, incluso en pacientes de bajo riesgo quirúrgico. Es necesario conocer la forma en que se realiza el procedimiento, tipos de válvulas disponibles, accesos más frecuentes y los tipos de dispositivos. Existe evidencia reciente que indicaría algunos beneficios de utilizar sedación como técnica anestésica, sin embargo, la elección se debe basar en cada paciente en particular, el centro y la experiencia de cada anestesiólogo a cargo. Si bien el RVAT hoy es mucho más seguro, existen complicaciones, entre las que se encuentran lesiones vasculares, leak paravalvular, complicaciones neurológicas, tamponamiento, entre otras. Un adecuado conocimiento y monitorización de ellas nos permitirá reducirlas en el perioperatorio.
- Introducción
La estenosis aórtica es la valvulopatía más frecuente y esta incrementa su incidencia con la edad[1]. Se espera que la incidencia y complejidad de pacientes con esta enfermedad también aumente con el tiempo, por el envejecimiento de la población.
El manejo estándar de todo paciente con estenosis aórtica severa sintomática correspondió durante mucho tiempo al reemplazo valvular quirúrgico, ya sea con prótesis biológica o mecánica. Esta técnica es bien conocida y presenta excelentes resultados[2]. A pesar de lo anterior, las características de este tipo de pacientes, como ya se mencionó, cada vez más añosos y con mayor número de comorbilidades, han determinado que surjan otras técnicas menos invasivas, con el fin de disminuir el elevado riesgo que la cirugía, que incluye circulación extracorpórea y todas las complicaciones relacionadas a un procedimiento abierto mayor, podría tener sobre estos pacientes. Es por lo anterior que, desde el año 2002, año en el cual se realizó el primer reemplazo valvular aórtico transcatéter (RVAT)[3], el manejo de esta patología ha sufrido cambios considerables, con muchos estudios actuales y guías clínicas apuntando a que esta sería una alternativa adecuada en pacientes de riesgo prohibitivo o elevado (recomendación clase I, evidencia nivel A) y de riesgo intermedio (recomendación clase IIa)[4]. Incluso, estudios más recientes aprueban su uso en pacientes de riesgo bajo[5]. En si misma, esta técnica ha ido avanzando a pasos extremadamente rápidos, los dispositivos actuales cuentan cada vez con mayor seguridad y menores efectos adversos, lo que ha aumentado aún más su popularidad.
Es por lo anterior, y teniendo en cuenta que con mayor frecuencia nos veremos enfrentados a la resolución de esta patología por medio del RVAT, es necesario para los anestesiólogos conocer sobre el adecuado manejo perioperatorio de este tipo de pacientes, conocer la técnica y sus posibles complicaciones, saber seleccionar la técnica anestésica según cada tipo de paciente en particular, entre otros temas, que se presentarán en la siguiente revisión.
Maximiliano Zamora H. 1 , Katia González C. 2 , Evelyn Borchert B. 3 , Guillermo Lema F. 4 ,5
1 Anestesiólogo.
2 Profesor Asistente Adjunto.
3 Instructor Adjunto.
4 Profesor Titular.
5 División de Anestesiología. Jefe de Unidad de Farmacología y Toxicología. Escuela de Medicina, Facultad de Medicina.
Pontificia Universidad Católica de Chile.
Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:
https://revistachilenadeanestesia.cl/revchilanestv50n03-03/