Restaurar función de cierta enzima protege contra enfermedad cardíaca a los pacientes con lupus

26 de marzo de 2019

Los pacientes con lupus, una enfermedad inflamatoria en la que el sistema inmunológico ataca los propios tejidos del cuerpo, tienen en promedio de siete a nueve veces más probabilidades de desarrollar una enfermedad cardíaca que la población general. Las mujeres más jóvenes con lupus tienen 50 veces más probabilidades de desarrollar la afección que las mujeres jóvenes sin la enfermedad.

Se cree que el endotelio, la capa única de células que recubre las paredes de los vasos sanguíneos, protege contra las enfermedades del corazón. Lo hace en parte produciendo óxido nítrico.

Un equipo de investigación de la Universidad Médica de Carolina del Sur (MUSC) en Estados Unidos, demostró que la enzima responsable de la producción de óxido nítrico deja de funcionar correctamente cuando es expuesta al suero de pacientes con lupus. También demostraron que su capacidad para producir óxido nítrico se puede restaurar mediante la administración de L-sepiapterina. Sus hallazgos se publicaron recientemente en la revista Lupus Science & Medicine.

El artículo aporta una prueba de concepto de que esta enzima podría ser un objetivo terapéutico para las enfermedades cardíacas en el lupusRestaurar la función de la enzima también podría ayudar a proteger a los pacientes con lupus contra la enfermedad renal. Las mismas fuerzas inflamatorias están actuando ahí, pero el daño ocurre mucho más rápidamente.

Los resultados también sugieren que restaurar la función protectora de las células endoteliales podría ser una estrategia para tratar la enfermedad cardíaca de manera más amplia.

Nuestro estudio demuestra que las terapias dirigidas hacia la restauración de la función de la enzima que produce el óxido nítrico podrían ser efectivas en la restauración de la función del endotelio“, explicó Jim C. Oates, autor principal del artículo, director de la División de Reumatología e Inmunología y vicepresidente de investigación en la MUSC.

Así que es una prueba de concepto que nos permite avanzar en el estudio de la enzima, la óxido nítrico sintasa, o restaurar su función como un objetivo para la enfermedad vascular en el lupus“, apuntó Oates.

Este es un primer paso en un largo proceso de intentar identificar terapias que podrían ser útiles para prevenir este fenotipo acelerado de enfermedad cardiovascular en pacientes con lupus“, dijo la doctora Joy Buie, becaria posdoctoral en la MUSC y primera autora del artículo.

Para el estudio, el equipo recolectó muestras de suero de un grupo de pacientes afroamericanos —específicamente pacientes de la tribu Gullah— con lupus que han sido monitoreados desde 2003. El Instituto de Investigación Clínica y Traslacional de Carolina del Sur en la MUSC ayudó al equipo de investigación a recolectar muestras de estudio de voluntarios control, a procesar las muestras de estudio de los pacientes y de los voluntarios control, y a almacenar de forma segura los datos recopilados.

El equipo de la MUSC mostró que la exposición de las células endoteliales al suero de pacientes con lupus causó que la enzima que producía el óxido nítrico dejara de funcionar correctamente. Esa enzima es conocida como sintasa de óxido nítrico endotelial.

En lugar de producir el óxido nítrico protector, comenzó a producir superóxido, que promovió una inflamación dañina.

En esencia, la enzima perdió su poder de protección contra las enfermedades cardíacas y, en cambio, promovió las condiciones que podrían conducir a estas. Un cofactor necesario para la función adecuada de la enzima se había vuelto inutilizable por la exposición de las células endoteliales al suero de pacientes con lupus.

La administración de L-sepiapterina a las células restauró la capacidad de la enzima para producir óxido nítrico al otorgar una fuente nueva y más confiable de ese cofactor.

Si intentas dar el cofactor en sí mismo, se oxida rápidamente por el mismo proceso que conduce a la disfunción de la enzima“, detalló Oates. “Por lo tanto, la L-sepiapterina, un precursor del cofactor, lo hace menos susceptible a esa rápida descomposición“.

La L-sepiapterina no está aprobada actualmente para la administración en humanos. Sin embargo, está bajo investigación para el tratamiento de varias enfermedades, incluida la gastroparesia diabética. Antes de que se pueda administrar a los pacientes, se necesitarán pruebas adicionales, tanto en modelos animales como en ensayos clínicos, para confirmar su eficacia y perfil de seguridad.

Pero estos hallazgos apuntan a una nueva forma de entender, prevenir y tratar las enfermedades cardíacas, una que no se limita solo a los pacientes con lupus.

Muchas personas se enfocan en controlar el colesterol para protegerse contra las enfermedades del corazón“, indicó Buie. “Nuestro estudio centra la atención en hacer que las células endoteliales sean felices y funcionales. Identifica los objetivos terapéuticos de las células endoteliales como importantes“.

Eso no quiere decir que controlar el colesterol y otros cambios en el estilo de vida no sean importantes. También pueden afectar qué tan bien protege el endotelio contra las enfermedades del corazón.

Las modificaciones en el estilo de vida pueden afectar el endotelio. La dieta occidental, caracterizada por alimentos altamente procesados ​​que son ricos en grasas saturadas y trans y baja en buenos aceites como los ácidos grasos omega-3, contribuye a la enfermedad cardíaca en todo el mundo, no solo en los pacientes con lupus“, refirió Oates. “Por lo tanto, cambiar a una dieta saludable y volverse más activo implica un largo camino“.

Pero los resultados sugieren que la función endotelial que se restaura farmacéuticamente merece un estudio a futuro como un enfoque terapéutico adicional para pacientes con lupus y otros con alto riesgo de enfermedad cardíaca.

https://salud.carlosslim.org/restaurar-funcion-de-cierta-enzima-protege-contra-enfermedad-cardiaca-a-pacientes-con-lupus/