Una dieta proinflamatoria contribuye al riesgo de cáncer colorrectal en ambos géneros

Una dieta proinflamatoria con abundante carne roja, procesada y vísceras, entre otros alimentos, aumenta el riesgo de cáncer colorrectal tanto en hombres como en mujeres; es muy riesgosa en hombres con sobrepeso y obesos y, paradójicamente, también en mujeres delgadas, muestra nueva investigación.

La relación entre una dieta proinflamatoria y el riesgo de cáncer colorrectal también es más potente en hombres y mujeres que no beben, según muestra el mismo análisis.

El hallazgo proviene de un estudio publicado el 18 de enero en la versión electrónica de JAMA Oncology.

“Hubo dos hallazgos principales en este estudio,” dijo en una entrevista con JAMA Oncology Fred Tabung, MSPH, Ph. D., de la Harvard T. H. Chan School of Public Health, en Boston, Estados Unidos.

“El primero fue que el mayor potencial inflamatorio de una dieta se relacionó con un aumento en el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal tanto en hombres como en mujeres, y el segundo fue que el riesgo de presentar cáncer colorrectal fue incluso más alto en hombres con sobrepeso y obesos que en mujeres delgadas y entre hombres y mujeres que no consumían bebidas alcohólicas,” añadió.

“Así que las recomendaciones dietéticas tanto para hombres como para mujeres serían consumir alimentos con un bajo potencial para contribuir a la inflamación del colon y que tengan alto contenido de verduras de hojas verdes, verduras amarillas oscuras, café y té y escaso en carnes procesadas, carnes rojas, granos refinados y bebidas endulzadas con azúcar,” dijo el Dr. Tabung.

Detalles del estudio

Para el estudio, el Dr. Tabung y sus colaboradores utilizaron datos del Health Professionals Follow-up Studyy el Nurses Health Study con el fin de vigilar el desarrollo de cáncer colorrectal en un total de 121.050 adultos durante un seguimiento de más de 26 años.

“Cada 4 años, los participantes respondían a cuestionarios de frecuencia de alimentos semicuantitativos validados para las evaluaciones de la alimentación,” explican los investigadores.

El equipo evaluó 18 grupos alimentarios para determinar su posible potencial inflamatorio utilizando una puntuación de patrón inflamatorio dietético empírico (EDIP, por sus siglas en inglés) basado en los niveles circulantes de tres biomarcadores inflamatorios: interleucina-6, proteína C reactiva y receptor de factor de necrosis tumoral–alfa 2.

Las dietas se evaluaron en una gama continua desde una dieta máximamente antiinflamatoria hasta una dieta máximamente proinflamatoria; entre más alta era la puntuación de patrón inflamatorio dietético empírico, tanto más proinflamatoria era la dieta.

Los alimentos que se relacionaron positivamente con las concentraciones de estos marcadores inflamatorios fueron tomates; bebidas gasificadas con alta y baja energía, verduras diferentes a las de hojas verdes frondosas y amarillas oscuras; y carne procesada, carne roja, carne de vísceras y pescado diferente al de carne oscura.

En cambio, cerveza, vino, café, té, verduras amarillas oscuras y de hojas verdes frondosas, aperitivos, jugo de fruta y pizza se relacionaron inversamente con las concentraciones de los mismos marcadores inflamatorios.

En el seguimiento a largo plazo, hubo 2.699 casos de cáncer colorrectal en las dos cohortes.

“Al comparar a los participantes del quintil de la puntuación de patrón inflamatorio dietético empírico más alto frente al más bajo, en los análisis ajustados para múltiples variables, el riesgo de cáncer colorrectal fue 44% más alto en hombres (hazard ratio [HR]: 1,44; IC 95%: 1,19 – 1,74; p < 0,001 para la tendencia), 22% más alto en las mujeres (HR: 1,22; IC 95%: 1,02 – 1,45; p = 0,007 para la tendencia) y 32% más alto en hombres y mujeres en combinación (HR combinado: 1,32; IC 95%: 1,12 – 1,55; p < 0,001 para la tendencia)," informan los autores del estudio.

La relación entre el quintil de la puntuación de patrón inflamatorio dietético empírico más alto y el aumento del riesgo de cáncer colorrectal se observó para todas las regiones anatómicas con excepción del recto en las mujeres, en el cual el riesgo para cáncer rectal no fue más alto entre las mujeres con las puntuaciones más altas que entre las que tuvieron las más bajas, añade…………

Pam Harrison

Para descargar la investigación completa haga clik a continuación:

https://espanol.medscape.com/verarticulo/5902358