Una prueba sanguínea podría revelar la gravedad de una conmoción con la misma precisión que una punción lumbar
- netmd
- 16 de julio de 2020
- Neurología
- 0 Comments
JUEVES, 9 de julio de 2020 (HealthDay News) — Una sencilla prueba sanguínea podría predecir la gravedad de una conmoción cerebral con la misma precisión que una punción lumbar invasiva, informan unos investigadores.
Se enfocaron en un biomarcador llamado cadena ligera de neurofilamentos. Esta proteína nerviosa se puede detectar en la sangre y en el líquido cefalorraquídeo cuando las células nerviosas se lesionan o mueren, según el estudio.
“Cuando su cerebro se lesiona, los niveles de la cadena ligera de neurofilamentos son más altos tanto en la sangre como en el líquido cefalorraquídeo”, señaló el autor del estudio, el Dr. Pashtum Shahim, del Centro Clínico de los Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU.
“Medir este biomarcador en la sangre mediante una sencilla extracción de sangre es más rápido y fácil que medirlo en el líquido cefalorraquídeo, que requiere una punción lumbar, que es más invasiva. Nuestros hallazgos son emocionantes, porque muestran que la sencilla prueba podría ser igual de precisa para determinar qué tan grave es una lesión y predecir cómo podría irle a la persona a largo plazo”, aseguró Shahim.
El estudio aparece en la edición en línea del 8 de julio de la revista Neurology.
Los investigadores observaron a 104 jugadores profesionales de hockey suecos, con una media de edad de 27 años, y a un grupo de control de 14 personas sanas que no eran deportistas.
De los jugadores de hockey, 45 habían sufrido una conmoción en la semana anterior, 31 habían sufrido conmociones múltiples, y 28 no tenían conmociones ni síntomas recientes.
Los jugadores con múltiples concusiones tenían un nivel medio de 18 picogramos/mililitro (pg/mL) del biomarcador de proteína en la sangre. Los que habían sufrido conmociones recientes tenían 12 pg/mL, y los que no habían sufrido conmociones ni síntomas recientes tenían 10 pg/mL. El grupo de control tenía 9 pg/mL. Esos niveles se correlacionaron con los niveles en el líquido cefalorraquídeo de los participantes.
Los investigadores también encontraron que los niveles en la sangre de los jugadores de hockey se asociaban con firmeza con más conmociones y unas conmociones más graves, incluso un año tras la lesión.
El estudio también incluyó a 162 personas con lesiones cerebrales, con una edad promedio de 43 años, y a un grupo de control de 68 personas sanas.
Las personas con lesiones en la cabeza tenían un nivel medio de 12.8 pg/mL del biomarcador en la sangre, mientras que el grupo de control tenía 6.3 pg/mL. Esos niveles fueron similares a los detectados mediante unas pruebas más sofisticadas, por ejemplo imágenes del cerebro.
El nivel del biomarcador en la sangre distinguió de forma precisa entre las conmociones cerebrales leves, moderadas y graves. La diferencia en los niveles del biomarcador en las personas con conmociones y el grupo de control fue evidente hasta cinco años tras la conmoción, según los investigadores.
“En ambos estudios surgió la idea de que la cadena ligera de neurofilamentos se muestra muy promisoria como biomarcador en la sangre”, comentó Shahim en un comunicado de prensa de la revista.
“Esto es notable porque la prueba podría ayudarnos a identificar a las personas cuyas conmociones podrían provocarles síntomas debilitantes durante años tras la lesión. Y esto podría ayudar a los médicos a tratar a sus pacientes de forma más específica para el tipo de conmoción que tengan”, añadió.
Pero la prueba todavía no está lista para el protagonismo. “Para poder implementar estos resultados en la práctica clínica, se necesitarán unos estudios de mayor tamaño para determinar cómo cambia la cadena ligera de neurofilamentos lo largo del espectro de las lesiones cerebrales y en distintas poblaciones”, anotó Shahim.