Una vacuna de ARNm contra el VIH se muestra promisoria en ensayos con animales
- netmd
- 14 de diciembre de 2021
- Alergología e Inmunología Clínica
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VIERNES, 10 de diciembre de 2021 (HealthDay News) — La puntera tecnología de ARNm otorgó a un mundo en crisis unas vacunas seguras y efectivas contra la COVID-19… ¿podría hacer lo mismo contra un enemigo mucho más antiguo, el VIH?
Una vacuna experimental contra el VIH que utiliza la misma plataforma de tecnología de ARNm que las vacunas de Pfizer y Moderna se muestra promisoria en ensayos con animales, encuentra un nuevo estudio dirigido por el gobierno de EE. UU.
“A pesar de casi cuatro décadas de esfuerzos de la comunidad de investigación global, una vacuna efectiva contra el VIH sigue siendo una meta escurridiza”, lamentó el Dr. Anthoni Fauci. Además de ser el principal asesor del país sobre las enfermedades infecciosas, Fauci también es director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de EE. UU., donde se está realizando la nueva investigación.
En un comunicado de prensa del NIAID, Fauci señaló que “esta vacuna experimental de ARNm combina varias características que podrían superar las deficiencias de otras vacunas experimentales contra el VIH, y por tanto representa un método promisorio”. Fauci también fue coautor del estudio.
Un experto en enfermedades infecciosas que no participó en la nueva investigación mostró un optimismo similar.
“Estos resultados son promisorios”, aseguró el Dr. Amesh Adalja, experto sénior del Centro de Seguridad de la Salud Johns Hopkins, en Baltimore.
Cree que las estrategias basadas en el ARNm tendrán “varias utilidades aparte de la COVID-19, en que hicieron su debut clínico. Una vacuna contra el VIH se ha mantenido esquiva, pero el estudio muestra una prueba de concepto en un animal de que quizá sea posible utilizando esta tecnología”.
En experimentos con ratones y monos Rhesus, el estudio del NIAID mostró que la vacuna provocaba respuestas inmunitarias de anticuerpos y celulares contra un virus parecido al del VIH.
En los monos, los que recibieron una vacuna de cebado seguida de varias dosis de refuerzo a lo largo de un año tuvieron un riesgo de infección por exposición al virus de inmunodeficiencia en simios y humanos (VISH) un 79 por ciento más bajo que los monos sin vacunar. El estudio se publicó en la edición del 9 de diciembre de la revista Nature Medicine.
El VISH se utilizó en la investigación porque los primates no humanos no son susceptibles al virus VIH-1 que infecta a los humanos, explicaron los investigadores.
La vacuna porta instrucciones de ARNm para producir dos proteínas clave del VIH, la Env y la Gag. Las células musculares utilizan las proteínas para producir partículas parecidas a virus (VLP, por sus siglas en inglés) con numerosas copias de la Env en la superficie, que entonces desencadenan una respuesta inmunitaria, según los investigadores.
Las VLP no pueden provocar una infección ni una enfermedad por sí solas, porque carecen del código genético completo del VIH, enfatizaron los autores del estudio.
En estudios con ratones, “dos inyecciones de la vacuna de ARNm que forma VLP indujeron unos anticuerpos neutralizantes en todos los animales”, según el comunicado del NIAID. Algo importante es que las proteínas Env generadas en los ratones tenían un aspecto muy similar al observado en el virus completo, mucho más que lo que se ha visto en intentos anteriores de producir una vacuna contra el VIH, señaló el equipo de la investigación.
Esto “imita de cerca a la infección natural, y podría haber tenido un rol al provocar las respuestas inmunitarias deseadas”, planteó en el comunicado el líder del estudio, el Dr. Paolo Lusso, del Laboratorio de Inmunorregulación del NIAID.
En experimentos con macacos Rhesus, los monos recibieron primero una dosis de vacuna, y luego dosis posteriores a lo largo del año siguiente. Según el NIAID, “la vacuna fue bien tolerada [por los monos] y solo produjo unos efectos adversos leves y temporales en los macacos, por ejemplo una pérdida del apetito”.
Poco más de 14 meses tras la dosis inicial, “todos los macacos vacunados habían desarrollado unos niveles mensurables de anticuerpos neutralizantes dirigidos contra la mayoría de las cepas en un panel de prueba de 12 cepas diversas del VIH”, según el comunicado. Más allá del promisorio aumento en los niveles de anticuerpos, la inoculación también pareció fortalecer la actividad de células T de los monos contra el VISH. Las células T son otro componente clave de la respuesta inmunitaria.
Pero todavía hay más trabajo, y la ciencia que parece funcionar en los estudios con animales no siempre da resultado en los humanos.
“Ahora estamos refinando el protocolo de nuestra vacuna para mejorar la calidad y la cantidad de VLP que se producen”, añadió Lusso. “Esto podría aumentar más la eficacia de la vacuna, y por tanto reducir el número de inoculaciones de dosis de cebado y de refuerzo necesarias para producir una respuesta inmunitaria robusta. Si se confirma que es segura y efectiva, planificamos realizar un ensayo en fase 1 de esta vacuna con voluntarios adultos sanos”.