Vinculan el acetaminofén durante el embarazo con el riesgo de TDAH de los niños

LUNES, 30 de octubre de 2017 (HealthDay News) — El acetaminofén se considera el medicamento al cual recurrir durante el embarazo. Pero un nuevo estudio amplía las evidencias que vinculan al fármaco con un aumento en el riesgo de problemas conductuales en los niños.

Investigadores de Noruega encontraron que entre casi 113,000 niños, aquellos cuyas madres utilizaron acetaminofén durante el embarazo tenían ligeramente más probabilidades de ser diagnosticados con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

Pero el vínculo se limitó al uso a más largo plazo, sobre todo de un mes o más.

Cuando las madres usaron acetaminofén durante 29 días o más durante el embarazo, sus hijos tenían el doble de probabilidades a ser diagnosticados con TDAH, en comparación con las mujeres que no usaron el medicamento.

Por otra parte, cuando las madres embarazadas usaron el fármaco durante una semana o menos, sus hijos mostraron una ligera reducción en el riesgo de TDAH.

El acetaminofén se conoce más por su nombre de marca, Tylenol, pero es un ingrediente activo de muchos analgésicos.

El nuevo estudio, dirigido por el investigador Eivind Ystrom del Instituto Noruego de Salud Pública, en Oslo, no es el primero en sugerir una conexión entre el acetaminofén prenatal y el TDAH.

Pero los expertos dijeron que sigue siendo difícil culpar al fármaco de forma definitiva.

“Ese es el dilema”, afirmó Christina Chambers, codirectora del Centro para unos Mejores Inicios en la Universidad de California, en San Diego.

Más o menos la mitad de las mujeres embarazadas usan acetaminofén en algún momento, de forma que es importante comprender cualquier riesgo, según Chambers, que no participó en el estudio.

Pero explicó que con un estudio como este es difícil saber si factores aparte del acetaminofén tienen la culpa, incluyendo las afecciones subyacentes que tenían las mujeres.

Según los investigadores del estudio, el uso a más largo plazo se vinculó con el TDAH si las mujeres lo usaron para el dolor, las fiebres o las infecciones.

Pero si una mujer usó los fármacos durante semanas para tratar una fiebre o infección, eso indica que estaba bastante enferma, apuntó Chambers.

Y si tomaba el fármaco para el dolor crónico, eso plantea la pregunta de qué efectos la afección que provocaba el dolor podría tener en su embarazo, señaló Chambers.

Por ahora, Chambers enfatizó que las mujeres embarazadas no deben de dejar de usar el acetaminofén para una fiebre por el miedo, dado que una fiebre sin tratar podría conllevar riesgos.

“Lo último que querríamos, a punto de que comience la temporada de gripe, es que las mujeres no usen el acetaminofén para bajar una fiebre”, dijo.

Chambers añadió que “este estudio sugiere que si hay una asociación causal entre el acetaminofén y el TDAH, se trata más bien del uso más crónico”.

En total, más de 2,200 niños del estudio fueron diagnosticados con TDAH, más o menos un 2 por ciento del grupo completo. El riesgo fue de poco más del doble entre los niños cuyas madres habían usado acetaminofén durante 29 días o más durante el embarazo.

¿Por qué el fármaco afectaría al riesgo de TDAH? Hay explicaciones “biológicamente plausibles” potenciales, afirmó Chambers.

Por ejemplo, el fármaco podría interferir con las hormonas maternas que son importantes para el desarrollo del cerebro del feto.

Pero incluso si el acetaminofén a largo plazo sí influye en el desarrollo del TDAH, dijo Chambers, este estudio sugiere que se trata de un efecto “modesto”.

“El riesgo de cualquier mujer en particular sería bajo”, afirmó.

Dicho esto, Chambers apuntó a un problema más amplio: actualmente se han estudiado muy pocos medicamentos en mujeres embarazadas, y se sabe bastante poco sobre la seguridad de utilizar cualquier medicamento en el periodo prenatal.

El estudio aparece en la edición en línea del 30 de octubre de la revista Pediatrics.

El Dr. Mark Wolraich, profesor de pediatría en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Oklahoma, escribió un editorial publicado junto al estudio.

Concurrió en que el estudio apunta solo a una asociación entre el acetaminofén y el TDAH, que podría reflejar un “tercer factor” implicado, como la afección subyacente que hizo que las mujeres tomaran el medicamento.

Además, explicó Wolraich, muchos factores podrían afectar al desarrollo del TDAH. Hay evidencias “mucho más potentes” de una influencia familiar, dado que el trastorno tiende a darse en las familias, anotó.

Pero Wolraich dijo que quizá las mujeres embarazadas deban tener “mucho cuidado” sobre el uso del acetaminofén por cualquier periodo extendido. Sugirió que las mujeres hablen con el médico antes de usar cualquier fármaco.

FUENTES: Christina Chambers, Ph.D., M.P.H., professor, department of pediatrics, and co-director, Center for Better Beginnings, University of California, San Diego; Mark Wolraich, M.D., professor, pediatrics, Child Study Center, University of Oklahoma Health Sciences Center, Oklahoma City; Oct. 30, 2017, Pediatrics, online

https://medlineplus.gov/spanish/news/fullstory_169425.html