Implante valvular percutáneo valve-in-valve en tricúspide. Primer reporte de caso de paciente pediátrico en Colombia
- netmd
- 17 de mayo de 2024
- Cardiología
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Resumen
Las anormalidades de la válvula tricúspide tienen una incidencia menor respecto a los defectos del resto de válvulas cardiacas y pueden deberse a causas primarias o secundarias. Recientemente, se ha estudiado su fisiopatología y su importancia en la morbimortalidad por causas cardiacas. En este sentido, la cirugía valvular tricúspide abierta tiene una tasa de morbimortalidad elevada, más aún cuando se trata de una reoperación. Es por esto que estos procedimientos endovasculares transcatéter cobran relevancia y recientemente se han publicado a lo largo del mundo algunos casos de intervenciones por este método, por medio de implante valvular percutáneo valve-in-valve en posición tricúspide. Se presenta el primer caso reportado de este procedimiento en Colombia en una paciente pediátrica, el cual transcurrió sin complicaciones y con el que se logró una mejoría significativa en la función valvular como paso inicial para continuar desarrollando la técnica y realizando este procedimiento en el país.
Introducción
Las anormalidades de la válvula tricúspide tienen una amplia variedad de causas, entre las cuales están las primarias, ya sea congénitas o adquiridas, como la anomalía de Ebstein, la displasia valvular tricúspide y la endocarditis infecciosa1,2, o las secundarias a otras condiciones, que son más comunes, como la enfermedad del lado izquierdo del corazón, la hipertensión pulmonar, la disfunción del ventrículo derecho o el origen idiopático3–5.
Cuando se requiere reemplazo valvular tricúspide, este generalmente se realiza con válvulas bioprostéticas ya que se ha encontrado que cuentan con mejor desempeño y menos riesgo respecto a las válvulas mecánicas; sin embargo, las válvulas bioprostéticas en esta ubicación tienen menor longevidad frente a otras prótesis valvulares6 con menos del 60% de los pacientes libres de reintervención a los quince años posteriores al primer procedimiento1.
Es por esto que, en la mayoría de ocasiones, es necesaria la reintervención, bien sea de manera quirúrgica abierta o por medio de una forma que ha sido descrita en algunos reportes de casos alrededor del mundo, que es la implantación de una nueva válvula bioprostética transcatéter valve-in-valve en posición tricúspide. Ya que, hasta el momento, no existen dispositivos exclusivos de válvula tricúspide, en los reportes de caso revisados se hace uso de válvulas originalmente fabricadas para válvula aórtica, en la cual sí se realiza este procedimiento de manera rutinaria6,7, pero presenta algunos riesgos, como la ubicación proximal al sistema de conducción, el riesgo de lesión del mismo que conduzca a bloqueo cardiaco, la obstrucción en el tracto de salida y, por otro lado, la endocarditis7.
No obstante, al realizarse en centros especializados llega a tener una alta tasa de éxito, convirtiéndose así en una excelente opción para el tratamiento de estos pacientes, ya que se disminuye la intervención invasiva que se haría en su lugar con una reparación quirúrgica abierta.6–8.
Diana C. Montenegro-Portilla1,2*, María J. Arcos-Hidalgo3, Ernesto L. Vallejo-Mondragón4,5, Antonio J. Madrid-Pinilla6
1Departamento de Pediatría, Universidad Libre, Cali, Colombia;
2Grupo de Investigación en Pediatría (GRINPED), Cali, Colombia;
3Departamento de Pediatría, Universidad Internacional del Ecuador, Quito, Ecuador;
4Departamento de Cardiología, Clínica Imbanaco, Cali, Colombia;
5Departamento de Hemodinamia Pediátrica, Clínica Imbanaco, Cali, Colombia;
6Departamento de Cardiología y Cardiología Fetal, Clínica Imbanaco, Cali, Colombia
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https://www.rccardiologia.com/frame_esp.php?id=361