Los investigadores están exponiendo las preocupantes consecuencias de la contaminación ambiental
- netmd
- 8 de abril de 2024
- Medicina General e Interna
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marzo 21, 2024
Respirar aire limpio es importante para la salud de todos; sin embargo, algunas comunidades enfrentan más riesgos que otras
El aire que respiramos puede a veces contener pequeñas partículas llamadas material particulado (PM, por sus siglas en inglés). Estas partículas tienen diferentes formas y tamaños y están formadas por cientos de sustancias químicas diferentes. Algunas son muy pequeñas, de menos de 2.5 micrómetros. Se les conoce como PM2.5. No podemos ver estas partículas, pero podemos inhalarlas.
Como grupo, las PM2.5 son responsables de la mayoría de los problemas de salud relacionados con la contaminación en los Estados Unidos. Sin embargo, no todas las PM2.5 son iguales. Algunas son particularmente tóxicas y el lugar donde vivimos puede marcar una gran diferencia en la calidad del aire que nos rodea.
Las investigaciones financiadas por los NIH han arrojado algunos hallazgos importantes sobre los efectos de la calidad del aire en diferentes comunidades.
Contaminación y segregación racial
Muchas comunidades enfrentan una carga injusta por la mala calidad del aire, y las comunidades de color a menudo enfrentan la mayor exposición a PM2.5. Esta disparidad está vinculada a la segregación residencial racial, donde personas de diferentes razas viven en áreas separadas, a menudo debido a factores sociales, económicos o discriminatorios. Cuando estas áreas están expuestas a más contaminación, pueden aumentar los riesgos para la salud de las personas que viven allí.
Un estudio de 2022 quería comprender cómo se distribuyen los componentes más tóxicos de las PM2,.5 en diferentes comunidades. Descubrieron que el aire en condados racialmente segregados, predominantemente de negros (en inglés) no solo tenían niveles más altos de PM2.5, sino que también tenían concentraciones más altas de metales tóxicos en comparación con el aire en comunidades racialmente integradas. Los niveles más altos de estos metales tóxicos fueron en su mayoría aquellos generados por los humanos (por ejemplo, de actividades industriales, quema de desechos y gases de escape de los automóviles).
La exposición a ciertos metales tóxicos puede causar cáncer. También puede dañar el cerebro y el sistema nervioso. Esto significa que muchas comunidades de color respiran aire que no sólo está contaminado, sino que también está cargado de sustancias químicas nocivas.
Hay esperanza: por un lado, las regulaciones sobre combustibles más limpios pueden contribuir en gran medida a mejorar la calidad del aire. Esto puede reducir las disparidades en la contaminación y mejorar la salud de las comunidades en mayor riesgo.
Contaminantes ambientales y ataques de asma en jóvenes urbanos
El asma es una enfermedad pulmonar crónica que crea inflamación de las vías respiratorias. Puede causar tos, sibilancias o falta de aliento, y dificultar la respiración. Los ataques de asma graves podrían requerir visitas a la sala de urgencias u hospitalizaciones. Los desencadenantes incluyen:
- Alérgenos ambientales (como polen, ácaros del polvo y caspa de mascotas)
- Infecciones víricas (como resfriado, gripe y COVID-19)
- Mala calidad del aire
Los niños de barrios urbanos de bajos ingresos tienen más probabilidad de sufrir ataques de asma frecuentes. Un estudio descubrió un vínculo entre la contaminación del aire exterior y los ataques de asma (en inglés) en niños y adolescentes que viven en esas zonas.
Para este estudio, los investigadores hicieron seguimiento a más de 200 niños y adolescentes en nueve ciudades de los Estados Unidos. Encontraron una conexión entre los ataques de asma no víricos (ataques que no son causados por virus respiratorios) y niveles moderados de dos contaminantes ambientales: ozono (en inglés) y material particulado fino. Estos contaminantes suelen ser más altos en áreas con mucho tráfico y actividad industrial.
Los investigadores observaron también que esos niños tenían cambios en los genes que desempeñan un papel en la inflamación de las vías respiratorias y vincularon esos cambios con niveles más altos de contaminación ambiental. Esto podría revelar cómo la contaminación afecta el cuerpo y podría causar ataques.
Este estudio es uno de los primeros en conectar contaminantes ambientales específicos con ataques de asma no víricos. Destaca por qué el aire limpio es tan importante para la salud de los humanos.
Un vínculo preocupante entre la contaminación y el riesgo de demencia
Un estudio reciente encontró un vínculo entre la contaminación ambiental y el riesgo de desarrollar demencia (en inglés) a medida que envejecemos.
Investigadores de la Universidad de Michigan compararon información sobre la calidad del aire con los datos de salud de más de 28.000 adultos mayores de 50 años en todo Estados Unidos. Encontraron un vínculo preocupante entre la exposición prolongada a PM2.5 y un mayor riesgo de demencia.
Las personas que desarrollaron demencia tenían más probabilidad de vivir en áreas con niveles más altos de contaminación ambiental. Además, tenían más probabilidad de no ser blancos y tener un nivel socioeconómico más bajo. Las personas expuestas a la contaminación ambiental procedente de la agricultura y las hogueras eran las que corrían mayor riesgo. Estos hallazgos sugieren que reducir la contaminación ambiental, especialmente la proveniente de estas fuentes, podría disminuir la posibilidad de desarrollar demencia en el futuro.